El pasado viernes 19 de mayo fui a Torreblanca a embriagarme de los duendes morenos de la gitanería. Tuvo lugar el último concierto del ciclo Zona Flamenca, que pasea el arte por los barrios más empobrecidos de Sevilla homenajeando a figuras señeras que tuvieron algo que ver con esos lugares y el flamenco. Se rendía tributo a Tragapanes. Para ello Miguel Ángel Vargas presentó a las Gitanas de Jerez: Cooperativa de emociones y compás, que revolucionaron el gallinero arrancando el jaleo y los oles de un público que llenó el Centro Cívico de Torreblanca. Carmen la Cantarota, Coral de los Reyes y Victoria del Diego dejándose la garganta en el escenario y Juana de la Curra y la inconfundible Tata Yoya regando el entarimado con su baile mamao. ¡Qué borrachera de age! Se tuvo que quedar gente fuera. Se perdieron también el cante del maestro José de la Tomasa, que cautivó junto a la guitarra soberbia de El Perla por soleá, taranto, seguiriya y fandangos. Y el baile racial de La Farruca con el compás de Torombo y Bobote, las guitarras de El Perla y Eugenio Iglesias y el cante de rebañones de David El Galli. La cosa admitió poca crítica y mucho disfrute. Flamenco en estado puro. Sirva esta fotogalería para acercarles un poco a la vivencia del ritual.
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